Son muchos los casos en los que, al buscar entrar o salir de casa de manera rápida, las personas partimos la llave dentro de la cerradura, ya sea por haberla insertado mal, por querer abrir o cerrar rápido la puerta, por no sacar la llave de manera correcta de la cerradura, etc.

Al ver la llave partida dentro de la cerradura lo único que viene a nuestra mente es que la cerradura se ha dañado y debemos llamar a un cerrajero para que la repare o la reemplace. Pues bien, en este artículo queremos mostrarte que esto no es del todo cierto ni del todo necesario, con algunas técnicas que puedes llevar a cabo tú mismo y que te ayudaran a solucionar este problema.

Como sacar una llave rota de una cerradura

Son muchas las técnicas que puedes aplicar al problema de tener una llave rota dentro de una cerradura, parte de estas técnicas son:

Lo primero es echar unas gotas de lubricante en el cerrojo y dejarlo actuar por un par de minutos. Esto ayudara a que la llave salga fácilmente pues podrá deslizarse lo más fácil posible hacia afuera. Un ejemplo de lubricante es el muy famoso y conocido 3 en 1.

Luego de que haya pasado un tiempo de haber aplicado el lubricante mete en el interior de la cerradura unas pinzas con punta tipo aguja e intenta enganchar el pedazo de llave con la pinza. Al notar que has logrado engancharlo tira hacia afuera el pedazo de llave. Al ver que ha salido un milímetro de la llave emplea unos alicates de punta fina para terminar de extraerla. También puedes ver los consejos de cerrajeros de Zaragoza para sacar el cilindro de una cerradura.

Si no logras que la llave salga en los primeros intentos puedes aplicar un poco más de lubricante. Así mismo, debes tener paciencia pues este es un proceso que toma un poco de tiempo y mucho más si no se cuenta con práctica en la técnica.

En caso de que no tengas pinzas con punta tipo aguja puedes usar unas hojas de sierra, pues en la dentadura podría engancharse fácilmente la llave. También podrías usar una aguja o un pedazo de alambre.

Prueba con echar un poco de pegamento instantáneo sobre el pedazo de llave que ha quedado fuera de la cerradura, luego insértala en la cerradura y espera unos minutos a que el pegamento actúe, luego intenta sacarla y el pedazo que ha quedo dentro de la cerradura deberá salir adherido al pedazo al que le habías aplicado el pegamento.

En caso de que la llave se haya roto mientras estaba insertada en la cerradura y quedo una porción en la parte exterior de la misma, puedes intentar sacarla con pinzas, tirando desde la porción que sobresale de la cerradura. Si no logras hacerla salir puedes intentar girándola un poco mientras tira de ella para desatrancarla.

Al aplicar esta técnica presiona o tira de la perilla de la puerta para que exista la menor presión posible en el cerrojo, al mismo tiempo con esto podrás sentir cuando el cerrojo se encuentra libre de presión, lo que te hará saber que la cerradura se ha desbloqueado.

Una forma de resolver de manera rápida esta situación de tener una llave partida en nuestra cerradura es empleando un destornillador de pala para presionar en el ojo de la cerradura y con una mano presiona el pomo de la puerta, para que exista la menor presión posible en el cerrojo. Al insertar el destornillador y hacer presión gíralo como si la llave estuviese fijada a él, con esto lograras desbloquear la cerradura.

Una vez logres desbloquear la puerta, ábrela y gira el destornillador en ambas direcciones e intenta abrirla y cerrarla un par de veces hasta estar plenamente seguro de que el destornillador funciona como una llave de manera confiable.

Esta técnica no soluciona nuestro problema pero nos ayuda a resolver el problema de apertura o cierre de nuestra puerta de manera rápida, mientras se consigue el tiempo para aplicar alguna otra técnica que te permita sacar el trozo de llave que ha quedado dentro de la cerradura.

Una técnica bastante drástica es la de taladrar, para esto debes saber que el objetivo se basa en perforar hasta una profundidad igual a la longitud de la llave perteneciente a la cerradura, por lo que debes elegir una broca que solamente quite el metal del cilindro de la cerradura, esta es la porción de la misma que gira junto con la llave.

Al eliminar la mayor parte del cilindro retirar todo el metal para que el mecanismo gire para abrir, luego retira la cerradura y llévala a una ferretería o local de cerrajeros para obtener e implementar las piezas de repuesto necesarias, que serían el cilindro y una nueva llave.

Por lo general la broca empleada en esta técnica es una de 5 mm, con esta se empieza a taladrar y luego puedes pasar a una broca de mayor tamaño.

Lo drástico de esta técnica es el hecho de que si taladras un poco más de lo que deberías o sin el cuidado respectivo podrías dejar inutilizable la cerradura, por lo que es importante estar seguro de que el tamaño de broca a emplear sea el adecuado y de que se está perforando solo hasta la profundidad que penetra la llave asociada a la cerradura.

Pues bien, ahora ya sabes que no es del todo necesario recurrir a un cerrajero en caso de que tu cerradura se haya dañado o de que tu llave se haya partido dentro del cerrojo, en estas situaciones todo lo que necesitas es poner en práctica las sencillas técnicas que te hemos proporcionado, estas, en conjunto con un poco de paciencia y práctica, te llevaran a obtener una solución económica y factible.

En caso de que estas técnicas no logren solucionar tu problema te recomendamos que recurras a un experto pues quizás el percance sea más grande de lo que crees y no pueda ser resuelto por ti mismo o que al buscar solucionar el problema empeores la situación dañando la cerradura por completo.